Debemos de tener claro que las normas de facturación no cambian, por lo que, si alguien está configurando una factura, haciendo un borrador de factura, todos los errores que se produzcan están al margen de lo que es la facturación misma, de modo que solo una vez que se ha facturado ese documento no se puede modificar.
En el caso de que hayamos facturado y hayamos cometido un error humano, se deberá hacer una factura rectificativa de la anterior, que tiene una entrada más en el registro y que deberá ser comunicada también a la AEAT. Sigue el mismo criterio que aplicamos ahora en los libros registro.
La importancia de la imposibilidad de modificación en Verifactu
La imposibilidad de modificar facturas una vez emitidas representa uno de los pilares fundamentales del sistema Verifactu y tiene implicaciones cruciales para la validez de factura electrónica. Esta característica no es una limitación, sino una fortaleza que garantiza la integridad del sistema fiscal español.
Cuando una factura empresarial queda registrada automáticamente en la base de datos de la Agencia Tributaria, no se permite ninguna modificación posterior que altere su contenido original. Esta inalterabilidad es esencial porque proporciona seguridad jurídica tanto para el emisor como para el receptor, protegiendo la validez de factura electrónica frente a posibles manipulaciones fraudulentas.
La imposibilidad de modificación elimina los riesgos de fraude fiscal que podrían surgir si las empresas pudieran alterar retroactivamente sus documentos contables. Cada factura empresarial emitida a través de sistemas Verifactu queda sellada digitalmente en el momento de su creación, creando un registro inmutable que sirve como prueba fehaciente de la transacción comercial realizada.
Esta característica también protege a las empresas frente a impagos y reclamaciones, ya que la validez digital de las facturas está respaldada por la trazabilidad completa del documento desde su emisión. Los errores humanos, aunque inevitables, deben corregirse mediante el procedimiento establecido de facturas rectificativas, manteniendo así la integridad del sistema y garantizando que cada modificación quede debidamente registrada y auditada por la AEAT.